28 de febrero de 2010

Paweł Berkowski II

Hoja en blanco

El mendigo está tirado en el suelo.
Dentro de poco se levantará, como el día,
aturdido.
La fealdad y la belleza.
No importa dónde, no importa cuándo.
El infierno es el infierno.
En un restaurante, un soldado de permiso
come gelatina con nata montada,
como si fuera la primera vez
en su vida. El olor de tu cuerpo
está todo el tiempo en el aire.
Invierno. Cuando oigo
- esquíes y más esquíes, no tienes otra cosa en la cabeza -
no soy capaz de imaginarme eso.
El plato vacío de la gelatina
con nata montada -
sí puedo.
Hay diferentes formas de emborracharse,
he pensado. Y la fina hoz de la luna
aparece sobre la ciudad.

Wrocław, 8.02.1998

De Mujer, atracción y crema NIVEA

2 comentarios:

Al norte de los nortes dijo...

Esa última imagen es terrorífica, consigue darle cuerpo a todas las imágenes del poema, el otro dela lata de sardinas, también está genial. un saludo,

Abel Murcia abelams77@gmail.com dijo...

Saludos y gracias por tus comentarios.
Abel